El concepto de inteligencia sufrió diversas transformaciones en pleno inicio de los años 80, gracias al estupendo trabajo de Howard Gardner con su Teoría de las Inteligencias Múltiple y gracias a él puede definirse el concepto de Inteligencia intrapersonal, el tema central de este interesante post.
Índice de Contenido
¿Qué es la inteligencia intrapersonal?
Es el estudio de las relaciones consigo mismo, cómo se proyecta esta persona, su conocimiento propio y todo un examen introspectivo para evaluar el transcurrir de su vida. Desde luego, guarda estrecha relación con las emociones que conduzcan a un bienestar pleno en todos los aspectos.
Todos los seres humanos están en competencia de forjar una imagen individual hasta entender todo lo que está a su alrededor sin ningún tipo de inconvenientes. También está la Inteligencia lógica matemática, que si pretende demostrar habilidades propias y para satisfacer el aprendizaje mediante las ramas del saber.
Como ha sido planteado al comienzo, la inteligencia intrapersonal es conocimiento amplificado del estado de ánimo, metas, objetivos y sentimientos que prevalecen en el ahora. Cuando la autoimagen está desarrollada, esa persona sabrá con certeza quién es, qué pretende lograr a mediano plazo y hacia dónde está dispuesta a ir para lograr sus metas. En materia de la conducta, la persona es consecuente con lo que expresa y las acciones para sustentar lo que dice.
Una característica reflejada con inteligencia intrapersonal es lo analítico que tiende a ser el individuo para evaluar cuáles son sus sentimientos actuales y cómo actuará más adelante ante determinada situación. Al momento de abordar todas sus necesidades emocionales, podrá consolidar su bienestar.
Howard Gardner
El autor de Teoría de las Inteligencias Múltiples señalan tres factores muy importantes de describir: autoconciencia, autorregulación y motivación:
- Autoconciencia: Es el saber absoluto de los sentimientos o emociones que experimenta el sujeto, con su respectivo control. Tales sentimientos tienen un impacto, para bien o para mal. Además, reconoce cuáles son las causas que desencadenan estas pasiones. Está al tanto de sus fortalezas y debilidades. Sabe aceptar críticas que fortalezcan la confianza en sí mismo.
- Autorregulación: Existe el conocimiento previo de cómo impactan las pasiones y por ello el sujeto actúa con anticipación en eso, para evitar algún conflicto interno si se trata de sentimientos negativos que dañan su entorno. Es la capacidad de reflexionar si algo está haciendo mal, entonces corregir a tiempo. Otros términos que abordan la autorregulación son: innovación, autoconfianza, autocontrol y adaptabilidad.
- Motivación: En la inteligencia intrapersonal es fundamental que los seres humanos reconozcan cuáles son las metas que pretenden cumplir en la vida. Tales objetivos deben estar muy próximos a sus habilidades, porque nadie sueña volar tan alto si no está preparado para asumir el sendero que conduzca a la satisfacción plena. Se relaciona con todos los logros consolidados, compromiso y disciplina en el proceso de trabajar sus metas.
La inteligencia intrapersonal tiene su propia ubicación dentro del sistema nervioso, en los lóbulos frontales para ser precisos. Estos elementos tienen la función de regular el comportamiento y estar al tanto de ellos, con previas consecuencias de realizar esas acciones. Los lóbulos parietales también participan en este tipo de inteligencia, con una función integradora e informativa.
Características
A continuación, algunos rasgos distintivos de los sujetos que gozan de inteligencia intrapersonal:
- Tienen la potestad suficiente de descubrir, explorar, descifrar o identificar sus sentimientos hasta explicarlos con destreza. Conocen su estado físico, siendo más fácil el saber distinguir las emociones que impactan para bien o para mal en su organismo.
- Alto índice de introspección. La persona reflexiona constantemente sobre su vida, todos los logros que ha consolidado o las malas acciones que cometió en el pasado y que está afectando su presente. Al final, esto permite conocerse más, replantear objetivos y ser mejor cada día, dejando atrás todo lo malo que pudo hacer. Quienes enaltecen esta inteligencia, mantienen reflexiones continuas para que la autoconfianza permanezca balanceada.
- Analizar sus acciones. A veces suele ocurrir que todo el entorno del sujeto está nublado o indeciso, pero con ayuda de la propia introspección podrá superar este inconveniente.
- Están al tanto de su realidad, adaptando la personalidad a sus destrezas, flaquezas y puntos por mejorar en pleno desarrollo. La toma de decisiones juega un papel muy importante para acelerar o atrasar su bienestar. Sin embargo, este sector que disfruta de inteligencia intrapersonal sabe cómo actuar para que la elección siempre sea la conveniente.
- Genera autocompasión. La persona logra entender el porqué de lo que ocurre a su alrededor. Es la capacidad de personarse y aceptar que cometió errores, porque al final nadie es perfecto y en el camino, los individuos pueden truncar su propio camino; siendo completamente válido, siempre y cuando rectifique mediante la introspección. Si algo sale mal, no es cuestión de flagelarse o enlistar las culpas, sino tratarse con amabilidad y comprensión. Las malas decisiones están en el aire, pero el paradigma cambia constantemente para conducir al bienestar.
- Conocen todas sus necesidades emocionales y cómo llenar esos vacíos. Basados en sus motivaciones, tienen la habilidad de establecer cada una de sus metas a mediano o largo plazo, sin olvidar en el rumbo sobre lo que quieren y hacia dónde van.
- Saben muy bien cómo cuidarse de sus propias emociones. La inteligencia intrapersonal llama esta característica como autocuidado. Es una competencia que requiere tanta habilidad correspondiente para colocar en una balanza las emociones buenas y malas, para que las segundas no estén superando a las primeras.
Profesiones
Todos los sujetos que están competentes en cuanto a su inteligencia intrapersonal, están dispuesto a ejercer las siguientes profesiones con holgura:
- Psicología.
- Psiquiatría.
- Anatomía.
- Sociología.
- Filosofía.
- Ramas que involucren el sentido analítico.
Ejemplos
La vida cotidiana se ha encargado de trazar algunos panoramas para determinar si una persona goza de inteligencia intrapersonal o no. Es momento de conocer algunos de ellos:
- Aquella persona que está al tanto de sus cambios físicos o emocionales. Aquella que sabe muy bien distinguir una buena decisión a otra incorrecta. Si alguien está triste en una etapa determinada, está consciente que en ese estado no puede ni podrá tomar buenas decisiones, porque su mentalidad está bloqueada por el sentimiento negativo de la tristeza. Cuando esté así, lo mejor es salir de paseo o platicar de los problemas con amistades para dar vuelta a ese estado de ánimo. También el hecho de posponer una actividad incómoda conlleva a estabilizar su semblante.
- Un empleado que esté dispuesto a renunciar a una oferta tentadora de trabajo, al darse cuenta que entre sus cláusulas está el establecer condiciones sociales duras para satisfacer los intereses del negocio o empresa. Esto quiere decir que conoce muy bien sus áreas sensibles y que por más tentadora la propuesta, con sus implicaciones, está al tanto que no rendirá como lo espera en ese trabajo.
Personajes
Algunas celebridades son reconocidas por su inteligencia intrapersonal muy marcada en sus vidas. En esta oportunidad dos grandes personalidades serán referencia: Virginia Woolf y Carl Jung:
- Virginia Woolf: Esta escritora ganó mucha popularidad en pleno siglo XX gracias a su obra completa. La mayoría de los ensayos son introspectivos, es decir, explica el manejo de sus pasiones o sentimientos a lo largo de su vida. La intención de la autora fue que su pública comprendiera su vasto mundo interior. Su literatura es extraordinaria en el presente, porque sirve de ejemplo para ese sector que carece o prefiere reforzar su inteligencia intrapersonal.
- Carl Jung: Este importante psiquiatra mantuvo vigencia durante todo el siglo XIX y su legado sigue vigente en las generaciones de relevo que estudian psicología. Fue su propio objeto de estudio, porque comprendía a la perfección sus pasiones, haciendo que las mismas estuviesen en constante análisis. No estuvo conforme con el autoconocimiento simple, pues realizó análisis exhaustivos de su propia personalidad.
Diferencias entre inteligencia intrapersonal e interpersonal
En primer lugar, hay que dejar constancia que ambas pertenecen a la Teoría de las Inteligencias Múltiples de Gardner. Otro aspecto que comparten es el carácter social o emocional, porque hay una preocupación por mejorar la imagen propia para salir adelante. Aunque tengan nombres similares, su objeto de estudio es totalmente opuesto. Mientras que la intrapersonal enfoca el interés en la estima propia, en el manejo de las pasiones internas; la interpersonal ocupa su esfuerzo en la relación con otras personas del entorno.
La inteligencia intrapersonal es mucho más reflexiva, porque el sujeto permite escucharse a sí mismo, entender sus sentimientos y mejorar los errores para que su valía rebase todas las fronteras sociales y emocionales. Lo más funcional de la intrapersonal es la evaluación constante que cada ser humano tiene de sus virtudes y defectos, hasta trabajar en los últimos hasta transformarse en nuevos dones que utilizará para ejercer un estudio o trabajo de su preferencia.
El ángulo interpersonal valora mucho más el esfuerzo de ser empáticos, de ponerse en los zapatos de los demás cuando enfrentan situaciones de apremio. Es el dar un consejo a un familiar, amigo o cercano que presenta un grado de desorientación, sin saber qué hacer con su vida.
Ambas inteligencias son igual de interesantes de estudiar, por lo que una u otra pesa más en la balanza. El quehacer psicológico promulga que las dos estén presentes como parte de desarrollo, así como la Inteligencia musical es trascendental para quienes mantienen ciertos gustos hacia las melodías.
Actividades para jóvenes y adultos
La inteligencia intrapersonal es reflexiva, realista y analítica en cuanto la introspección de los pensamientos, sensaciones o pasiones. Conlleva al bienestar emocional cuando el sujeto descubre a la perfección el manejo de cada elemento señalado con anterioridad. Las destrezas intrapersonales fomentan las Habilidades sociales al final de cuentas, pero la prioridad es la reflexión propia antes de dar el siguiente paso.
Quienes no profundizan en este tema han cuestionado en más de una oportunidad ¿Cómo desarrollar la inteligencia intrapersonal? Bien, es hora de describir las actividades más convenientes hasta consolidar este concepto que alguna vez Gardner popularizó.
Analizar las emociones
En alguna oportunidad del día, en un momento de descanso, es pertinente sentarse a meditar sobre cómo se siente esa persona en la actualidad. Se trata de poner en orden todas las ideas que están revueltas, centrar las emociones y controlar los sentimientos desbordados. Un buen tip es conversar de cada inquietud con un sujeto que conozca a la perfección a ese emisor que quiere comunicar su inconformidad.
Todas las emociones tienen una razón de ser, una base que moldea la conducta y eso es fundamental analizarse en horas de descanso, cuando la mente esté más despejada. Mientras más control exista en las pasiones, mejor será tomar una decisión valiosa en la vida. Incluso, esa persona está apta para saber muy bien cuáles son las pasiones que debe evitar, con el objetivo de no entorpecer el bienestar.
Registrar las emociones o sentimientos
Tomar una pequeña libreta para escribir cuáles sentimientos están causando un malestar y el resto que hace sentir bien en la vida cotidiana. Por esta razón, los diarios son un arma eficaz para desahogarse en caso de tener muchas cosas qué decir y no hay a quién contarlas. Mantener la libreta con apuntes representa una alternativa para analizar todos los progresos o retrasos encausados por pasiones malignas. Con el registro de estos datos, el sujeto está capacitado para ensamblar todas las inquietudes hasta llegar la introspección sanadora.
Dedicar un tiempo para examinar su ser
Es comprensible que el trabajo o estudio demanden mucho tiempo. Sin embargo, es muy saludable sentarse a reflexionar acerca de los últimos acontecimientos; aquellos de gozo y otros de incomodidad. Si el autoestima está en riesgo por todo lo malo que ha ocurrido, es conveniente pensar en las buenas acciones recientes, para que la valía no se minimice. Es preciso imaginar en cómo puede mejorar sus limitaciones, hasta convertirlas en más destrezas que mejoren la salud mental.
Revisar valores, prioridades y objetivos
Las metas que un niño traza no es la misma que un adolescente mantiene desde la pubertad hasta la adultez. Esto quiere decir que las metas son tan cambiantes como los intereses humanos a lo largo de su vida. En virtud de tantos cambios, es vital que el sujeto centre sus pensamientos en todo lo que anhela y qué debe hacer hasta consolidar sus metas. Las necesidades evolucionan a través del tiempo, moldeándose a paso lento, para que los objetivos tengan más consistencia al momento de cristalizarlos.
Todos los objetivos disfrutan de cierta jerarquización, es decir, algunos son más favorables cumplirlos por encima de otros. Las metas de mediano a largo plazo son las que merecen toda la atención, porque al final de cuenta darán más satisfacciones en la vida de ese individuo. No todas las metas son logradas al mismo tiempo, ni mucho menos es un proceso sencillo.
En el camino la persona puede equivocarse para enmendar los errores que obstruyan el paso hacia la meta. Con buen raciocinio y conocimiento de las flaquezas, es probable recuperar el terreno perdido en poco tiempo. De igual manera es sano recordar todos los planes elaborados en el pasado y que han servido de mucho en el presente, para no olvidar los efectos de su valía para lo que vendrá en el futuro.
Adelantarse a las situaciones difíciles
En cierto momento es favorable predisponerse cuando el bache afectivo, emocional y hasta financiero viene en camino. Este consejo toma vigor en el conocimiento de virtudes y defectos, para saber cómo asimilar de la mejor manera posible el trance que esté por tocar la puerta de su vida. Con ayuda de la imaginación es increíble recrear un evento adverso para definir qué tan competente o regular es para sobrepasar todos los obstáculos, si en efecto, las carencias son más fuertes que el problema o la virtud más poderosa que la vicisitud.
Encontrar actividades que favorezcan la reflexión
Existen actividades que no solo estimulan la imaginación, sino además conllevan a una reflexión constante y al mismo tiempo productiva para alcanzar una inteligencia intrapersonal efectiva. Todos los seres humanos son distintos, por lo cual la reflexión es un paso trascendental, para otros suele ser algo insignificante o no están claros que lograr este tipo de inteligencia es importante para poder desempeñar relaciones con alguien más, adentrándose en el plano interpersonal.
Los diálogos internos conducen a ese examen necesario para entender muchas cosas. Las personas necesitas reencontrarse consigo mismas en caso que estén perdidas o no saben qué hacer para revertir un evento traumático negativo.
El primer consejo es escuchar música relajante y pensar en los acontecimientos recientes, sin escatimar qué tan buenos o desfavorables fueron. La música ayudará a relajar la mente, a comenzar la introspección y a llegar a una conclusión acerca de los últimos pormenores. Segundo, practicar la meditación con frecuencia es la alternativa para canalizar los pensamientos y relajar el cuerpo en simultáneo. Acto seguido, conversar con un amigo íntimo que sea capaz de solidarizarse con el emisor o salir de paseo para despejar la mente de toda perturbación reciente.
Cualidades
El ser humano al contar con inteligencia intrapersonal es capaz de desenvolverse sin problemas en su día a día. Quien conozca a la perfección todos sus talentos, habilidades, destrezas o incluso defectos, está en capacidad para salir adelante, siempre y cuando las flaquezas no sean más poderosas que todo el talento que posee para demostrarse a sí mismo que es valioso. A continuación, algunas ventajas que poseen los sujetos enmarcados en este trabajo de Gardner:
- Muy buena autoestima, así las flaquezas que posee traten de minimizar su valía.
- Autocontrol de sus pasiones. Esta cualidad sale a flote, por ejemplo, cuando un individuo está en medio de un conflicto que dispare sus sentidos como un robo cercano, un atentado y aún viendo su alrededor, mantiene la calma y se aleja del sito ileso.
- Conoce muy bien las fronteras de su vida. No es capaz de irrespetar las decisiones o sentimientos de los demás.
- Puede cabalgar a la perfección en espacios temporales de pasado, presente y futuro. Diferencia muy bien los acontecimientos vividos en cada etapa. Supera la adversidad del pasado hasta convertirlos en frutos con virtudes en el presente y futuro.
Las personas más realistas son aquellas que cuentan con este don, así como Virginia Woolf y Carl Jung lo hicieron, hasta dar a conocer sus emociones controladas con escritos o pensamientos filosóficos que han perdurado con el transcurrir del tiempo.
Ellos logran un equilibrio emocional cuando están al tanto de cada necesidad que desea cumplir, porque generalmente son afectivas. Si el niño crece en un seno familiar benigno, tendrá una buena imagen de si que consolida en su etapa adulta con trabajo y constancia en todo lo que haga.
Finalmente, una vez lograda la inteligencia intrapersonal, todos tendrán el talento, ganas o alternativas suficientes para establecer el contacto con otros, a través de la inteligencia interpersonal.
Manejar la empatía es preciso para entender los pormenores que rodean a los demás, los distintos problemas que afectan su mundo y los consejos que puede facilitar para iluminar un poco el camino hasta que salga adelante si presenta un inconveniente considerable en su entorno social. Las relaciones entre todos es saludable si comprenden su ser interno.
Test
No es más que el mismo test de inteligencia múltiple que el mismo Gardner respaldó en su tiempo para determinar su una persona goza de este don o desarrolla más habilidades de interés como las siguientes:
- Inteligencia lingüística.
- Inteligencia lógica matemática.
- Talento visual.
- Inteligencia kinestésica.
- Inteligencia musical.
- Capacidad interpersonal.
- Inteligencia naturalista.